política
OSEF y acuicultura: proyectos claves trabados por sectores que buscan poner palos en la rueda
La discusión sobre la reforma de la Obra Social y la regulación de la actividad acuícola sigue empantanada. Legisladores señalan que hay actores políticos que intentan frenar los avances con maniobras dilatorias.
La Legislatura fueguina atraviesa horas clave con dos temas urgentes en agenda: la crítica situación de la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF) y la reforma a la ley de salmonicultura. Sin embargo, ambos proyectos siguen demorados por el accionar de sectores políticos que, según distintas voces del oficialismo, buscan poner palos en la rueda para que estas iniciativas no prosperen.
Hasta última hora del lunes, las comisiones de Salud y Presupuesto seguían reunidas analizando punto por punto el proyecto que intenta darle un salvataje institucional y financiero a la OSEF, una obra social golpeada por la falta de prestaciones, deudas millonarias y la creciente demanda de los afiliados. La novedad fue que esta vez sí asistieron todos los legisladores, incluida la vicegobernadora y presidenta del Parlamento, Mónica Urquiza.
En paralelo, también se reunió la comisión de Recursos Naturales junto a Legislación General para seguir debatiendo la reforma a la ley que regula la salmonicultura en la provincia. El nuevo proyecto propone modificar el límite de producción actual —hoy fijado en 50 toneladas por año— y establecer parámetros más exigentes para la protección ambiental. El encuentro contó con la participación de funcionarios, ambientalistas, académicos, referentes de pueblos originarios y activistas, pero la falta de consenso llevó a declarar un nuevo cuarto intermedio.
En ese contexto, fuentes legislativas confirmaron que otros temas sí llegarán al recinto este martes, como la nueva ley orgánica del Registro Civil y la modificación a la normativa de la Escribanía General de Gobierno. Mientras tanto, los expedientes sobre OSEF y salmonicultura continúan trabados, en buena parte por presiones políticas que prefieren el estancamiento antes que el cambio.
Desde sectores cercanos al oficialismo denuncian que hay una intención clara de frenar estos debates fundamentales con excusas procedimentales y demoras innecesarias. “No quieren que las cosas cambien, aunque eso implique sostener el colapso de OSEF o la contaminación de nuestros mares”, alertó un legislador que pidió mantener el anonimato.
El reloj corre y la ciudadanía espera respuestas. Pero mientras tanto, los proyectos siguen atrapados entre intereses cruzados y una política que, en lugar de avanzar, muchas veces elige obstaculizar.