USHUAIA.– La natación en aguas frías viene ganando cada vez más adeptos en la capital fueguina. Así lo aseguró César Barrientos, referente de esta disciplina, quien resaltó que actualmente entre 60 y 70 personas participan de manera activa en distintos grupos de la ciudad.

“Estamos donde queremos estar, donde elegimos estar, amigándonos con lo nuestro, porque lo que nos impulsa es esta cosa de hacer posible lo imposible”, expresó Barrientos.

El nadador explicó que se trata de una práctica que requiere entrenamiento, chequeos médicos y cuidados especiales, ya que las temperaturas extremas exigen medidas de seguridad. “Hay deportistas de elite, pero también mucha gente lo hace como terapia. Algunos se sumergen solo unos minutos y otros nadan distancias de 1.500 a 2.000 metros, siempre con boya de seguridad y con personas en tierra listas para asistirlos cuando salen del agua”, detalló.

Barrientos recordó que su inicio en esta disciplina fue junto a Walter Ruano en la zona de Bombilla, donde nació el grupo “Aguas Frías”. Primero nadaban con traje de neoprene y luego se animaron a hacerlo sin él.

Entre los proyectos que entusiasman a los nadadores locales está la posibilidad de realizar travesías en aguas antárticas. “Para nosotros sería como ir al patio de tu casa, porque somos la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. Lo lindo para cualquier nadador fueguino sería nadar en la parte de atrás de tu casa”, afirmó, aunque reconoció que este desafío implica una fuerte burocracia y no depende solo de ellos.

Finalmente, Barrientos sostuvo que sería clave contar con mayor acompañamiento institucional. “El Infuetur y la Secretaría de Turismo de la Municipalidad de Ushuaia deberían promover el nado en aguas frías en eventos internacionales para darle más visibilidad y difusión”, subrayó.