"Decidimos comer algo rápido, una picada", dijo María José una mujer que pasa sus vacaciones de verano 2020 en Villa Carlos Paz otro de los destinos argentinos que estalla de gente.

“Vino el mozo, le pedimos la carta y nos dijo que no tenían. Inmediatamente nos preguntó qué queríamos comer y le pedimos una picada para cuatro, dos limonadas, un chopp y un fernet”, especificó la clienta.

Cuando se hizo la hora de entrar al teatro, un integrante del grupo pidió la cuenta y el mozo se acercó a la mesa: “Nos dijo que el total era 3.450 pesos y quedamos helados. Le solicitamos el ticket pero, como tardó muchísimo en traerlo, fuimos nosotros a la caja a pedirlo”.

 

“Me da mucha bronca que se aprovechen así de la gente. Es una vergüenza. Nosotros reconocemos que cometimos el error de no insistir por la carta ni preguntar los precios, pero no es para que se abusen así de los turistas. Nosotros no volvemos más”, se quejó la mujer