¿Cómo te involucraste con la música?

Mi viejo es músico, así que desde chico siempre tuve algo con lo que hacer ruido, primero agarré una criolla de guerra con cuerdas gastadas, después un tecladito y luego, siguió la bata, el primer amor .

¿Cuál fue el primer disco que compraste?

El primer disco que tuve en la mano era un CD que decía “Varios” escrito con lapicera, 12 temas de Nirvana, que explotaron mi cabeza sin saber ni quiénes eran, un tema de Foo Fighters “Best of You” banda que me iba a influenciar muchísimo más adelante. Y seis temas de la gran Alanis Morissette. Pero el primer disco que me compré fue “Gorillaz” de Gorillaz allá por el 2001, fue un flash, porque era una banda animada y la música que hacían era algo totalmente nuevo para mí.

¿Cómo nace la banda?

Este proyecto nace a partir de la separación de mi primera banda, por mayo del 2015. Me quedé con varias canciones en la mano, sin músicos para tocar en vivo, y muchas ganas de seguir tocando.

Ahí decidí salir de gira solo, y que iba a llevar a adelante un proyecto en el que cualquiera que quiera participar, pueda colaborar, pero no dependa exclusivamente de otras personas.

Creo que así nació la idea de un proyecto “solista”.

¿Quiénes son los integrantes?

Esta el gran Nicolás Yurjevic en la batería y voz, Cristian Lucero en Guitarra y Voz y por ahora sin bajista oficial, aunque cuando necesitamos nos acompañan Emilio Cervera y Lucas Ruarte, unos musicazos de la puta madre.

¿Cómo se definen?

La idea es, hacer música y darlo todo siempre. Es difícil definirnos porque involucra establecer un límite quizás, pero creo en el hecho de que somos un grupo de amigos que nos tomamos muy en serio nuestra música y dejamos todo en la cancha.

¿Cuáles son sus influencias?

Uffff, jaja varias!! En mi caso, quizás va por el grunge y el rock alternativo, hablando de mi identidad musical. ¿Pero influencias?  Son muchas creo. Te puedo estar escuchando un tema de Robert Johnson y saltar a algo de Cerati, seguir con Santaolalla y después pasar a Linkin Park y Carajo, ¡un ensaladón de frutas!  jaja ¡escucho mucha música!

¿Tienen canciones propias?

Si, si tenemos. Varias de hecho, “Sinequanon” es el primer disco del proyecto, salió en el 2018, al año siguiente se lanzó el single “La Marca” con su videoclip, y ya estamos trabajando en el próximo disco.

¿Cómo es el proceso creativo de sus temas?

Por lo general, yo armo un boceto de la canción con una guitarra y la voz, y nos juntamos a laburar las partes en el ensayo, armar los arreglos, definir estructura, etc.

¿Cómo está influyendo la cuarentena en su trabajo como banda?

Se extraña mucho la parte de juntarnos, a veces la banda también se vuelve familia y eso se extraña mucho. No hay shows en vivo, no hay giras, no hay acústicos.  

El ámbito de la música fue uno de los más golpeados por la pandemia, y al que menos prioridad le van a dar para volver a reactivar.

De todas maneras, uno siempre encuentra la forma de mantenerse creando y también de seguir tocando, quizás las redes sociales son un gran placebo para hacer de esta cuarentena algo más ameno.

¿Para cuándo el disco?

La idea en enero del 2020 (jaja), era grabar y sacar el disco durante este año.  Ahora, tengo esperanzas de que podamos grabar a fin de año y sacarlo en el 2021.

¿Expectativas para este 2020?

Creo que nos vamos a merecer una girita por Tierra del Fuego, Buenos Aires y alguna otra provincia más como Córdoba, Santa Fe, también estamos invitados en San Juan y Mendoza, todo depende de lo que económica y socialmente active el gobierno.

Quizás durante esa gira podamos grabar el disco, quiero volver a Romaphonic.

Pero más allá de todos los buenos deseos que tengo con mi país, hay que reconocer que es una situación muy difícil, sin precedente, única. Creo que empatizar y acompañarnos entre todos también es una responsabilidad que tenemos como músicos, artistas, y sobre todo como seres humanos.

Fotos: Gustavo Elizeche

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