River hizo los deberes este miércoles en el estadio Ciudad de La Plata: venció 2- 1 a Atlético Tucumán, y accedió a los octavos de final de la Copa Argentina en donde jugará el Superclásico contra Boca.

Sin Rafael Santos Borré, quien viene con algunas molestias; ni Matías Suárez, con una lesión en la rodilla, Marcelo Gallardo apostó por una delantera con Federico Girotti, Lucas Beltrán y Julián Álvarez, todos pibes de la casa. Y fue justamente Girotti una de las figuras de la noche platense. El joven y grandote delantero abrió la cuenta antes del cuarto de hora tras una asistencia de Fabrizio Angileri, luego de una gran jugada colectiva.

Entonado, el propio juvenil puso el 2-0 a los 21, en lo que fue su primer doblete en Primera División. Con la ventaja se vieron buenos momentos de River, que tuvo el tercer en varias oportunidades. El equipo tuvo buenos movimientos ofensivos, y estuvo atento a los huecos que quedaban por la desesperada salida del rival.

Pero cuando parecía que el “Millonario” goleaba, llegó el descuento de Heredia que le puso suspenso al encuentro. El tanto del “Decano” desconcertó al equipo de Núñez que ya no fue el mismo. De esta manera, Atlético Tucumán se fue encima de River, y apareció, una vez más, la gran figura de Franco Armani, que desactivó las chances claras que tuvo el conjunto norteño.

De esta manera, fue triunfo de River, que no pierde en el certamen desde la edición 2015 (fue eliminado por Gimnasia en 2018 pero por penales) y que así se metió en los octavos de final donde se enfrentará ante Boca. Se tratará del primer Superclásico de la Copa Argentina.