En este sentido, se dispuso un dispenser de agua potable en el “Parque de los 100 Años” con el fin de que los vecinos y vecinas que hacen uso de este nuevo espacio de esparcimiento puedan recargar sus botellas y, de esta manera, fomentar la utilización de envases retornables.

Con pequeños cambios en nuestros hábitos podemos generar grandes resultados en beneficio de nuestro ambiente. Cuidarlo contribuye al bienestar de los y las riograndeses, y posibilita que entre todos y todas sigamos construyendo una Río Grande para toda la vida.